La inexistencia del CEE, motivo de nulidad de contrato


Todos sabemos que uno de los problemas al que se enfrenta el dueño de un inmueble a la hora de alquilar es el de los morosos, tanto si se trata de una vivienda como si de lo que hablamos es de un local en el que se pretende instalar un negocio; muchos son los casos de impagos y no pocos los que acuden a cualquier argucia con tal de librarse de abonar el alquiler.
El Certificado de Eficiencia Energética, obligado en estos casos, se puede convertir en un útil motivo para que el inquilino astuto se libre de sus obligaciones o, al menos, incline la balanza a su favor a la hora de negociar con el casero que no ha tenido la precaución de contratarlo en su momento.
Así, la no existencia del CEE supone una infracción directamente contra los derechos del que alquila y que podría solicitar la anulación del contrato al menoscabar las condiciones en las que éste se firmó, estando en su derecho el inquilino a reclamar incluso una reducción del precio pactado por desconocimiento de las características energéticas del inmueble y, por tanto, del gasto que los suministros correspondientes le podían suponer.
Dado, además, que la mayoría de las viviendas y locales no alcanzan una calificación energética aceptable (difícilmente encontraremos algún caso por encima de la categoría C) el desconocimiento de este dato supone una grave lesión de los intereses del consumidor, en este caso el inquilino, que se compromete a ciegas sin ser informado del gasto energético que su uso conlleva.
 

 

Sanciones en Navarra




Han transcurrido nueve meses desde la entrada en vigor del RD Real Decreto 235/2013 sobre la certificación energética y la gran mayoría de los anuncios que se publicita en las inmobiliarias, no llevan la clasificación energética de la propiedad.

Es Navarra la primera comunidad que ha empezado con la distribución de multas a las agencias inmobiliarias. El importe a pagar es bastante significativo entre 300 € y 6000 € cuando la tarifa media para obtener un certificado energético es de 150 €

Es el caso de “Jesús Eslava, de la inmobiliaria Marina Inmuebles o como la agencia FLM que ambos reconocen que muchos propietarios no están por la labor de gastarse 120-160€ aunque las inmobiliarias ofrezcan los servicios de certificadores para facilitar los trámites y que el coste sea el mínimo.

"Hemos mandado circulares a los propietarios para que hagan los certificados y estamos dando de baja a aquellos que no los tienen. Lo que no es justo es que se cargue contra las inmobiliarias porque son las más expuestas", reitera Eslava. Por su parte, Esteban Calahorra, de Alfa 10, insiste en que no hay razón para sancionar a las inmobiliarias, "pedimos a Industria una moratoria para que se puedan adaptar a la ley".
 
Datos recopilados del articulo de las noticiasdenavarra.com 

http://www.portalcertificadoenergetico.com/es/noticias-certificacion-energetica/8/titulo/abren-inspecciones-en-navarra-para-ofertar-propiedades-sin-etiqueta-energetica

Las primeras sanciones

A estas alturas nadie puede aún escudarse en el desconocimiento de la nueva norma que obliga a contar con un Certificado Energético para vender o alquilar una vivienda o local por lo que parece increíble que, al precio irrisorio al que se puede conseguir, haya todavía una gran mayoría de propietarios y profesionales que hacen oídos sordos y siguen obviando el asunto corriendo el riesgo de ser sancionados duramente.

Es por ello que, aunque se hayan hecho esperar, las primeras multas han aparecido y Madrid ya ha puesto la primera este pasado diciembre, siete meses después de la entrada en vigor del decreto ley que regula el certificado. Y lo ha hecho con mano dura: 4.000 euros por una infracción muy grave por falsedad en una calificación.



Desde su entrada en vigor, todas las Comunidades han iniciado cientos de expedientes de control y no tardaremos mucho en tener conocimiento de muchas más multas dado el elevado índice de incumplimiento que existe todavía.
No cabe duda de que se impondrán muchas más sanciones y es de esperar que así sea porque de alguna manera se debe premiar a los que se esfuerzan por hacer las cosas dentro de la legalidad.